Actualizada 21/05/2015 a las 22:51
Disculpe el atrevimiento de dirigirme a usted de forma abierta y transparente, pero tengo la convicción de que es lo más adecuado. Por su condición de candidata a una alta responsabilidad política y por la mía como director editorial de infoLibre, este modesto periódico digital que ha publicado datos sobre su última declaración de la renta. Estaremos de acuerdo en que, cada cual en su función, ambos estamos obligados a respetar a ciudadanos y lectores, y a mí no se me ocurre mejor manera de demostrar ese respeto que contando honestamente lo que uno considera lo más aproximado a la verdad.
1º.- Ha confirmado usted la veracidad de los datos de la información firmada por mi compañero Manuel Rico, según la cual su última declaración de la renta recoge que ganó 369.000 euros en 2013 por su trabajo como cazatalentos para la empresa Seeliger&Conde, y otros 5.000 euros reflejados como procedentes de “juegos de azar” (aunque ha matizado que esos 5.000 euros corresponden a un premio literario que le concedió elABC de Sevilla por un artículo taurino. Enhorabuena).
“Al que le pique, que se rasque”, ha comentado usted sobre el hecho de cobrar 369.000 euros al año por dedicar a la citada empresa de búsqueda de directivos “un 20 por ciento” de su tiempo, según explicó en su día el presidente de la misma, Luis Conde, a la agencia Efe. Con la que está cayendo en España y la devaluación salarial impuesta en los últimos años, no debería sorprenderle que a millones de ciudadanos pueda resultarnos obsceno que usted perciba tales ingresos por una labor a la que dedica la quinta parte de su tiempo. El resto habrá seguido ocupándose de la política, como venía haciendo a tiempo completo desde el año 1979.
Créame, señora Aguirre: me sorprende que a usted le sorprenda que nos preguntemos cuáles serán las valiosísimas gestiones que usted ha hecho para merecer tales emolumentos, especialmente cuando se trata de una empresa de cazatalentos que la fichó después de que usted no se cansara de acertar en la selección de altos cargos de su confianza. (Baste decir que su exnúmero dos Francisco Granados está en la cárcel, y varios de sus exconsejeros imputados por corrupción).
2º.- Ha hablado usted con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para exigirles medidas inmediatas para que se investigue “la filtración” de esos datos, cuya publicación tiene según usted “unas consecuencias gravísimas”. Ha acudido después (a bordo del autobús de campaña del PP de Madrid y en compañía de los periodistas que la siguen) a la Fiscalía General del Estado para presentar una denuncia por lo que considera un posible delito de descubrimiento y revelación de secretos tipificado en el Código Penal, además de una vulneración de la Ley General Tributaria.
Curiosamente, utiliza usted los mismos argumentos que expuso Juan Carlos Monedero (hoy retirado de la primera línea de Podemos), cuando presentó sendas denuncias ante la Fiscalía y la Agencia de Protección de Datos tras conocerse que había declarado ingresos de 425.000 euros procedentes del extranjero. Usted puso a caldo a Monedero, y el PP calificó de “ridícula” e “infantil” la petición de que se investigara la “revelación de secretos” por parte de Hacienda. Por supuesto, el ministro Montoro se negó a abrir investigación alguna.
3º.- Ha conseguido usted, sin embargo, que esta vez Montoro reaccionara en cuestión de horas. El ministerio de Hacienda ya ha hecho público un comunicado oficialanunciando que “la Agencia Tributaria ha abierto una investigación interna” sobre el asunto.
Creo innecesario extenderme sobre los efectos del mensaje que se lanza a la ciudadanía acerca de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley que garantiza la Constitución.
4º.- Ha manifestado usted que la “filtración” de lo que ha ganado de una empresa privada es “un ataque a la seguridad jurídica sin precedentes”.
Mire, señora Aguirre: NO. Aquí se trata de transparencia. Usted es candidata a continuar en la política nada menos que como alcaldesa de Madrid. Usted es la primera que ha hablado en televisión de los “más de 100.000 euros” que gana su contrincante Antonio Miguel Carmona (quien por cierto lleva unos cuantos días pidiéndole que enseñe su declaración de la renta como él ya ha hecho con la suya). Debería usted recordar que lo primero que hicieron Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal tras el estallido del caso Bárcenas fue anunciar que se harían públicas las declaraciones de la renta de los máximos dirigentes del PP. (Las de Rajoy están colgadas en la web de Moncloa). Y, sobre todo, es usted una de las líderes del partido que más presume de “atajar la corrupción”, de reivindicar “la absoluta transparencia en los ingresos” y de exigir que todo aquel que ocupe un cargo público dé cuenta de “lo que tiene cuando llega y lo que se lleva cuando sale”. Repase sus propios discursos, declaraciones, entrevistas y mítines.
Fíjese si estaremos de acuerdo en la necesidad de transparencia como única forma de recuperar el crédito democráticoque no sólo la revindicamos para los políticos, sino también para los medios de comunicación, sobre todo si pretenden vivir de los lectores y no depender de partidos, bancos o grandes empresas. (En infoLibre publicamos nuestras cuentas en detalle cada año. Pinche aquí y compruébelo).
Y 5º.- Ha declarado usted al diario El País que este tipo de filtraciones impide que se den “las condiciones fundamentales para que España pueda salir adelante en la recuperación económica”. Reconozco que esta afirmación me ha dejado estupefacto, sin saber si habla en serio o está de coña.
Permítame la osadía de tranquilizarla en este aspecto: yo creo que la recuperación económica española no depende de que se hagan públicas sus ganancias, ni siquiera en el caso de que llegáramos a conocer la rentabilidad empresarial de sus brillantes gestiones como cazatalentos. Y también creo que ejemplos como el suyo, su falta de transparencia respecto a sí misma y respecto alos negocios de su marido, impiden que se den “las condiciones fundamentales para que España pueda salir adelante” en la imprescindible regeneración democrática.
Atentamente,
Jesús Maraña
Ole,ole,y ole…