Represión sindical en el Clínico San Carlos con el apoyo de los sindicatos CCOO, SATSE, UGT,CSIT y CSIF

Desde el MATS llevamos tiempo denunciando la persecución sistemática que sufrimos por parte de la Administración y las burocracias sindicales mayoritarias: nos excluyen de reuniones, nos quitan delegadxs, nos ponen trabas para actuar en los centros de trabajo. Y en una escalada represiva inaceptable, desde la dirección de RRHH y la gerencia del Hospital Clínico San Carlos, tras meses de haberlo intentado, han llevado a cabo de manera forzosa el desahucio de nuestro local sindical aduciendo falsamente la falta de representación sindical del MATS en el hospital, a pesar de haberles presentado la documentación debida demostrando que poseemos representación sindical en el centro.
El MATS disponemos de cinco delegadxs en la Junta de Personal del Área Centro, uno de ellos localizado en este hospital, así como una delegada derivada de la Ley Orgánica de Libertad Sindical. Todo ello, demostrado y tal como reconoce la propia gerencia en la notificación de desahucio que nos entregan el día 17/03/25. Dicha notificación fue entregada a nuestro delegado de junta en el Hospital Clínico San Carlos abordándole de manera abrupta mientras desempeñaba sus labores como cualquier otro/a trabajador/a siendo imposible abandonar el servicio y con apenas treinta minutos de margen respecto a la hora de desahucio.
Este ataque no es un caso aislado. Ya denunciamos en RRSS que en el Hospital 12 de octubre los sindicatos CCOO, UGT, CSIF, CSIT y SATSE, con la aprobación de la dirección, impidieron que lxs delegadxs participasen para tratar el traslado al nuevo hospital. Traslado que ya es sonado por haber significado un deterioro en las condiciones de lxs trabajadorxs y usuarixs, junto con varias privatizaciones de servicios como lencería o almacén.
Y no les ha bastado sólo con eso, sino que, contraviniendo la Ley de Libertad Sindical, el día 19/03/2025 dirigiéndonos a la Dirección de Recursos Humanos, a la Dirección de Gestión y a la Dirección Gerencia para disponer del local compartido al que según ellos nos dan acceso, nos indican que dicho local es inexistente a día de hoy. Todo esto habiéndose producido un secuestro de documentación protegida por la Ley Orgánica de Protección de Datos, ya que se trasladó sin ningún responsable legal de nuestro sindicato para velar por su privacidad durante el desalojo forzado de nuestra sección.
Este hecho es solo la gota que colma el vaso de un continuo intento de acoso y derribo hacia nuestra sección y hacia nuestra manera de hacer sindicalismo que tanto parece ser que molesta.
También se nos ha denegado la participación del Comité de Seguridad y Salud, al cual como delegados sindicales tenemos derecho acudir, lo que contraviene claramente la Ley De Prevención de Riesgos Laborales según el art. 38. y no sólo eso si no que en un acto caciquil por parte de algunos de los sindicatos de la mesa sectorial (CCOO, UGT, CSIF, CSIT-UP y SATSE) se nos ha retirado el delegado de prevención que nos correspondía, con la aceptación de la Consejería de Sanidad, por el reparto acorde a la representatividad tal y como marca la normativa vigente.
Queda patente y manifiesto que quieren aislarnos y silenciarnos. Quieren que desaparezcamos. Porque nuestro modelo sindical choca directamente con los intereses de quienes quieren hacer negocio con la sanidad pública y con quienes los defienden.
En manos de una cúpula burocrática, los grandes sindicatos hoy han dejado de ser instrumentos de lucha. Los dirigentes de los sindicatos mayoritarios se han integrado en un sistema en el que su papel es contener los conflictos, desmovilizar y garantizar una «paz social» que solo beneficia a las administraciones y a las empresas. Su estructura burocrática y jerárquica y llena de privilegios los aleja, no solo del conjunto de lxs trabajadores, sino incluso de sus propias bases, convirtiéndolos en aparatos que negocian en despachos sin contar con la gente a la que dicen representar. Han impuesto como habitual la firma de acuerdos que no cuestionan la precarización ni la privatización de los servicios públicos, sino que las gestionan los ataques a lo público con el menor ruido posible. Animamos a las y los afiliados de estas organizaciones a repudiar este ataque a la libertad sindical. Porque no es solo un ataque al MATS sino al conjunto de las y los trabajadores que nos organizamos para defender nuestros derechos.
La existencia de un sindicato como el MATS es una amenaza para ellos y para las direcciones de los centros. Porque demostramos que otro sindicalismo es posible. Un sindicalismo que lucha por una sanidad pública y de calidad, al servicio de las necesidades de lxs trabajadorxs y de lxs usuarixs y no para que las empresas hagan negocio con un derecho tan fundamental. Un sindicalismo que apuesta por la autoorganización desde abajo en asambleas, sin liberados sindicales ni subvenciones y que ayude a lxs trabajadorxs a pelear por sus derechos, con el enorme poder que eso supone.
Nuestro modelo sindical, basado en la autoorganización, la democracia asamblearia y la independencia de clase, supone una ruptura con los modelos burocráticos y de aparato. No negociamos a espaldas de la plantilla, ni aceptamos acuerdos que legitimen recortes ni nos sometemos a las reglas impuestas por quienes gestionan la precarización. Apostamos por la participación directa, por la movilización y por la acción colectiva, porque sabemos que la lucha sindical no se gana en despachos, sino en las calles y en los centros de trabajo.
Por eso quieren erradicarnos. No es solo que nos impidan actuar, que nos expulsen de reuniones o que nos quiten delegadas y delegados. Quieren borrar hasta la memoria de que un sindicalismo asambleario, independiente y combativo puede existir. Necesitan que todo el mundo crea que «no hay alternativa», que la única opción es resignarse y aceptar las reglas del juego que nos imponen. Pero nosotrxs sabemos que sí hay alternativa. La estamos construyendo día a día, en los centros de trabajo y en las calles. No somos un sindicato de gestiones y papeleo, somos una herramienta de lucha. No nos vamos a rendir. No nos van a callar.
Hacemos un llamamiento a todos los trabajadores, las organizaciones del sindicalismo combativo, los movimientos sociales, a la afiliación de los sindicatos mayoritarios y todos aquellos que defienden los derechos democráticos a pronunciarse contra este atropello la libertad sindical.
¡Basta de represión! ¡Por un sindicalismo independiente, combativo y democrático!
MATS – Movimiento Asambleario de Trabajadoras y Trabajadores de la Sanidad