El personal de Urgencias y del SUMMA 112 inicia una campaña de movilizaciones para exigir personal, material e infraestructuras adecuadas para frenar los colapsos.
Personal, material, infraestructuras adecuadas y más camas. Elpersonal de Urgencias y del SUMMA 112 lo tiene claro. No quieren repetir los colapsos que se ven “todos los años” en los hospitales madrileños. Y para ello han decidido unirse para “emprender movilizaciones conjuntas”.
Trabajadores de los servicios de Urgencias de los hospitales 12 de Octubre, Gregorio Marañón, La Paz, La Princesa, Henares, Ramón y Cajal, Puerta del Hierro y del servicio de emergenciasSUMMA 112 han dado un paso adelante. Por el momento, han iniciado una recogida de firmas. Irá a más.
“Estudiamos emprender movilizaciones conjuntas de mayor calado”, han advertido. El primer objetivo es presentar el 25 de enero en la Consejería de Sanidad miles de firmas denunciando “las causas del deterioro que sufrimos”.
En apenas 12 horas, ya han recogido 3.200 apoyos. Un nuevo invierno, pero con las mismas escenas de saturación. Algo que ha colmado el vaso: “Nos unimos para que haya una mejor calidad en la atención al paciente”.
“La situación de colapsos que venimos teniendo hace peligrar la seguridad del paciente y hace imposible llevar a cabo el plan de humanización que pretende la Comunidad de Madrid”, se puede escuchar en los vídeos de denuncia de los trabajadores de los distintos hospitales madrileños.
Pero los profesionales entienden que no deben ser los únicos en tomar cartas en el asunto (más allá de los responsables políticos). En este sentido, en otro de los vídeos grabados en las puertas de La Paz han llamado a los ciudadanos a que se movilicen a su lado: “No podemos más, esto no es soportable. Por favor, échenos una mano”.
La “lucha”, tal y como lo llaman, contra la “dramática situación” no se limita únicamente al ámbito hospitalario. También apuntan, por ejemplo, a la Atención Primaria donde las citas de cuatro minutos provocan la imposibilidad de atender las urgencias leves, “por lo que estos pacientes acuden a los hospitales”. Básicamente, la pescadilla que se muerde la cola.
El escenario que se avecina, aún sin la gripe haciendo mella, no es mejor: “Esto se agravará con el cierre de los centros de salud por las tardes y las reformas proyectadas en los grandes hospitales, que perderán aún más camas”.
Así, los profesionales han entendido que ahora es el momento de que los servicios de Urgencias “estén dotados con el personal, el material y las infraestructuras adecuadas” y en los centros de Atención Primaria. La movilización ha echado a andar.