El espantoso abandono y profundo desinterés por parte las direcciones, de los mandos intermedios y de la Conserjería, nos está llevando tanto al personal, como a los mayores que allí habitan, a vivir y trabajar al límite de lo digno. Se está cometiendo un abuso de poder, llegando al mal trato tanto físico como psicológico y humano.
Abusan de muchos de los residentes porque tienen sus capacidades físicas y psicológicas disminuidas y de las trabajadoras que vivimos con impotencia esta situación, como si nosotras desatendiésemos lo mas básico. Las reclamaciones que planteamos diariamente ante Direcciones y Jefaturas de Área son tratadas con la mas profunda indiferencia.
Este es mi testimonio, donde trabajadoras y residentes LLORAMOS, literalmente, de impotencia por lo que aquí se sufre día tras día.
FALTA DE MATERIAL DE TRABAJO.
Es frecuente encontrarnos a la hora de empezar el trabajo del colectivo de TCAES:
– No tenemos ni TOALLAS ni PAÑALES
– CARROS obsoletos que no cumplen con las normativas
FALTA DE PERSONAL.
En un día normal a las 7.30h comenzamos en un modulo de 20 residentes con Grandes Dependientes a veces 2 TCAE, otras 1 para realizar su aseo.
- Nos vemos obligadas, por la presión de la brutal carga de trabajo, a tener que realizar estos aseos solas, teniendo que movilizar a residentes de mas de 80 Kg de peso sin ninguna ayuda.
- No nos proporcionan ropas adaptadas para ellos, con lo que se les produce un dolor innecesario a la hora de vestirles ya que muchos sufren artrosis, artritis severas…. Y nosotras terminamos con graves lesiones en muñecas y hombros.
- Entre medias de los aseos, nos DELEGAN tareas tan delicadas como son las del REPARTO y ADMINISTRACIÓN de MEDICACIONES. Con esa presión y velocidad de trabajo es muy fácil que se den errores en los repartos ya que enfermería no puede acompañarnos. Estos errores se pueden producir:
PRIMERO, por que nosotras no sabemos lo que damos ni tenemos porqué saberlo
SEGUNDO, por que hay mucho personal eventual, que no conoce a los residentes.
Cuando esto sucede la política por parte de los mandos es silenciarlo y, si es descubierto por la familia, te invitan a que pidas disculpas, como si ellos no fueran responsables de esas situaciones. Así, y con suerte, no ponen reclamaciones o las retiran.
- Continuamos con la delegación de funciones aplicando SOLAS los tratamientos médicos a todos los residentes. Cualquier personal sanitario sabe la importancia de realizar dicha aplicación con la mayor sepsis necesitando un tiempo y una dedicación y observación de su evolución.
- Con el mismo ritmo acelerado, y cada vez mas agotadas, damos los desayunos, teniendo en la cabeza que aún tienes mínimo otros 7 residentes que asear, con lo que nada más lejos de ser un momento de relajación y disfrute con ellos, que es lo que se merecen.
- Al tiempo que se realizan estas tareas, el resto de los residentes quedan a su suerte, no hay nadie que vigile y cuide de los residentes con alzheimer o con deterioro cognitivo, que como ya ha pasado, se quede sin personal de compañía en el salón subido a una banqueta o escapando por las escaleras, etc… Ya que las puertas no están bloqueadas y los ascensores tienen completa accesibilidad a todos ellos.
- Residentes, que por la falta de personal no son levantados hasta las 12.30 de la mañana, hora hasta la que los TCAES no podemos parar a desayunar.
- Por las tardes se repite todo con 3 TCES para 40 residentes, cambios de pañales con el riesgo de que al trabajar solas se den accidentes de caídas o con grúas, ect….
- Por las noches 4 TCAES para 220 residentes, donde 1 aux en una sola noche realiza 172 cambios de pañal, teniendo que dejar al descubierto módulos como los de RESIDENTES con ALZHEIMER, enfermería…. por un tiempo de entre 2 y 3 horas, en las que ellos pueden deambular, caerse, o necesitar ayudas de cualquier tipo. Se imaginan empezar a cambiar pañales a las 10.30 y terminar a las 4 de la mañana?!!! Y que esos residentes sean interrumpidos sus descansos a esas horas, para de nuevo comenzar realizar la segunda ronda a las 5.45h.
- Con el mismo personal y de forma siempre sorpresiva, te hacen abandonar tus funciones para acompañar a residentes a consultas médicas en hospitales, perdiéndose citas por mala organización y falta de personal.
Bajo esta presión, ¿quien puede dar una atención de calidad? No creemos que sea posible.
El 99% de este colectivo de TCAE sufrimos lesiones en muñecas, epicondilitis, lesiones dorso lumbares, por no hablar del estrés laboral y del síndrome del trabajador cansado que, por supuesto, no se reconoce como enfermedad laboral.
DEFICIENCIAS EN LAS INFRAESTRUCTURAS:
- No tenemos aire acondicionado, encontrándonos con 33º a las 7.30h de la mañana. ¿Imaginan trabajar en estas condiciones? Y para los residentes, sin posibilidad si quiera de poder abrir las ventanas, por motivo de seguridad, es peor aún.
- Residentes hacinados en algunos comedores, sin capacidad de mover ni una silla de ruedas por falta de espacio.
- Los techos de los salones se caen con los residentes debajo. Hace dos semanas, sin ir mas lejos.
- Techos caídos en los sótanos de la mayoría de ellas (en este momento Villaviciosa y Alcorcón que sepamos)
- Tan solo un baño para 40 residentes, donde hay que realizar los cambios de pañales con biombos en el salón general.
- Módulos de 40 residentes (con alzheimer y deterioros cognitivos ) sin bloqueo de puertas que dan a escaleras así como ascensores a los que tienen plena accesibilidad.
- De qué sirve poner dispositivos de aviso (pulseras, etc) si el residente puede deambular corriendo graves riesgos de caídas y pérdidas sin que las pulseras lo eviten. El Gobierno del Partido Popular nos quiere hacer creer que esto sustituye al personal que realmente podría evitar esto, pero es mas barato dar al mismo y ya sufrido personal un whalki.
- Habitaciones donde no hay espacio para mover una silla de ruedas
En esta Residencias Publicas no hay espacio, tiempo y energía libre de estrés, para poder dar un trato digno a los residentes que quedan a nuestra responsabilidad. El trato que damos, a base de un voluntarismo constante, no es el que queremos dar dar: nada más lejos de los que ni ellos ni nosotras nos merecemos porque, según entramos por la puerta, nos hacen quitarte el abrigo de la dignidad, como si de un espacio en guerra se tratara.
Tenemos que acabar con este abuso y con esta forma tan deshumanizada de entender los cuidados.
Todo esto esta siendo denunciado por trabajadoras de estas Residencias Publicas.
Una TCAES de la Comunidad de Madrid