Pedimos la suspensión del proceso de privatización de las cocinas que ha puesto en marcha el Gobierno de Cristina Cifuentes en el Hospital universitario La Paz.
Las cocinas públicas de este hospital, hoy en día, gozan de una acreditada calidad y son garantía de una correcta alimentación para las personas ingresadas en este centro.
¿Qué intereses hay en cambiar un modelo que funciona bien por otro de dudosa calidad?
La privatización de las cocinas siempre supone en la práctica una peor calidad asistencial y un mayor gasto de fondos públicos. Hemos visto ejemplos de ello en experiencias similares.
En el año 2016 la Xunta de Galicia tuvo que relevar a la empresa SERUNION, concesionaria de la restauración Hospital Álvaro Cunqueiro, por la mala calidad de la comida y por la presión de los pacientes. También en residencias de mayores y en escuelas, se han dado casos sobrados que ejemplifican que la privatización de los servicios de cocina tienen como resultado un significativo descenso de la calidad de la alimentación.
Otro ejemplo de privatización son los servicios de limpieza, que en el Hospital La Paz han supuesto un claro retroceso en cuanto a la calidad de ésta, ya que la contrata no cumple los pliegos en cuanto a nº de personas que deben de estar empleadas en la limpieza del hospital.
Por todo ello: Pedimos la suspensión del concurso aparecido en el BOCM del pasado 9 de marzo y el mantenimiento del servicio público y de calidad.
