El Ramón y Cajal prohíbe ingresar desde Urgencias a pacientes que no sean de su área

Según la normativa de la Comunidad de Madrid toda la región es un área única de salud. La norma fue aprobada en 2010 con Esperanza Aguirre en el Gobierno autonómico y Juan José Güemes como consejero de Sanidad.

Paciente de 66 años, con parálisis en las piernas e infecciones de repetición. Su hospital de referencia es el Gregorio Marañón dónde ha ingresado en varias ocasiones. Al aparecer, de nuevo, fiebre alta, decide cambiar de centro y acudir al Ramón y Cajal. Allí trabaja un amigo de su hija, Luis Fernández Pineda, que es cardiólogo infantil y delegado del MATS. Luis habla con los compañeros de Urgencias para ver si lo pueden ingresar porque su estado parece bastante grave. Le dicen que no es posible, que hay una orden del director gerente de ingresar únicamente desde urgencias a los pacientes que pertenezcan a la antigua área 4.

Luis conecta entonces con el servicio de enfermedades infecciosas. Les cuenta lo que le ocurre al paciente: lleva meses con infecciones de repetición y tiene un nuevo brote. Le dicen que no se preocupe, que van a bajar a atenderle a urgencias y que después lo intentaran ingresar en planta. Le visitan en urgencias y deciden no moverlo, en principio, dado su mal estado. Estaba monitorizado, con antibiótico en vena, con tensión baja, con mucha fiebre y en un estado grave, dice Luis. A las tres de la madrugada, ya que no pueden darle cama al paciente, le trasladan desde Urgencias en ambulancia a su hospital de referencia. Los médicos de enfermedades infecciosas y el jefe del hospital insisten: «Hay una orden expresa del director gerente, que nos prohíbe el ingreso desde Urgencias de pacientes que no sean de la antigua área.»

Para Luis Fernández Pineda lo que ha ocurrido: «Es inaudito. Una vez que de madrugada deciden trasladar al paciente al Gregorio Marañón lo que esperas es que se haga el traslado al día siguiente de una manera más ordenada y menos dantesca. Es inconcebible.»

Esto ocurría el pasado lunes. Hoy el paciente sigue ingresado en el Gregorio Marañón. «Está ingresado en un centro en el que no quiere estar. El gerente no pude interpretar la ley a su antojo y saltarse a la torera unos decretos vigentes como el de Área Única y Libre Elección de médico. Basta de tomar decisiones que perjudican a los enfermos».

Fuente: Cadena Ser