- El Clínic es el segundo mejor de España, detrás de La Paz, según el nuevo barómetro del sector
- Los grandes hospitales continúan prestando la mejor asistencia pese a los recortes y las críticas
MADRID
MIÉRCOLES, 3 DE DICIEMBRE DEL 2014
La cuestionada sanidad pública sigue prestando a los españoles una mejor asistencia que la privada pese a los recortes y a la ofensiva de privatizaciones, en gran parte frustradas. Así lo atestigua un ‘ranking’ de nueva creación elaborado por la empresa Merco y presentado ayer en Madrid con el aval de las organizaciones colegiales de médicos y enfermeros y las asociaciones de pacientes. En cada una de las 14 especialidades médicas analizadas, el primero de la clasificación es siempre un hospital público, aunque compita con centros sanitarios privados superespecializados.
Un ejemplo es la lista de los mejores servicios de oftalmología. El que cuenta con mejor «reputación», según la terminología del informe, es el perteneciente al hospital público Ramon y Cajal de Madrid, por delante del Centro Oftalmológico Barraquer de Barcelona, que ocupa el segundo puesto. O la lista de urología, encabezada por el servicio del también hospital público madrileño de La Paz, justo por delante de la catalana Fundació Puigvert.
CLASIFICACIONES SEPARADAS
El peso de la sanidad pública es tan importante que, a la hora de hacer la valoración global de cada uno de los hospitales, los autores del estudio han optado por separar en dos listas diferentes a los públicos y a los privados, porque el número de servicios que ofrecen, su diversificación y equipamiento tecnológico no admiten comparación y los privados quedarían relegados en la parte baja.
En el ‘top ten’ de los públicos figuran tres catalanes y cinco de Madrid. El mejor es La Paz, el mismo que ha debido lidiar con la crisis delébola a través del recién absorbido Carlos III. Su gerente, Rafael Pérez-Santamaría, con gran prestigio en el sector, sonó hasta ayer mismo como candidato a sustituir a la dimitida Ana Mato al frente del Ministerio de Sanidad.
El segundo puesto es para el Clínic; el tercero, para el también madrileño Gregorio Marañón, y el cuarto, para el Vall d’Hebron. El hospital de Sant Pau cierra la lista de los mejores al situarse en el número diez.
En el ‘ranking’ por especialidades, el Clínic logra la mayor puntuación en neumología, nefrología y aparato digestivo, y el del Vall d’Hebron, en oncología médica, mientras que La Paz la consigue en 6 de las 14 que son objeto de valoración.
DESIERTO PRIVADO EN CATALUNYA
Los centros catalanes brillan por su ausencia, en cambio, en la clasificación de los privados. Solo figura, y en la octava posición, laQuirón de Barcelona. Los dos primeros son la Clínica de la Universidad de Navarra y el HM Montepríncipe de Madrid. La ausencia catalana está compensada con su buena posición en la prestación de algunas especialidades. Son los casos ya citados delBarraquer, la Puigvert y también del Sant Joan de Déu, tercero en pediatría.
Es la primera vez que se elabora el ‘ranking’, denominado por sus autores monitor de reputación sanitaria (MRS). El objetivo es publicarlo anualmente hasta que se convierta en la referencia del sector. El hecho de que venga avalado por las organizaciones mayoritarias ya es significativo de su relevancia. Su independenciaparece garantizada al no contar con financiación externa. Esta provendrá de los centros que ahora quieran recibir datos pormenorizados que les permitan conocer sus carencias y sus fortalezas.
Su elaboración se ha basado tanto en los indicadores de los resultados sanitarios como en la opinión de los expertos. Se ha contado con2.399 entrevistas a médicos, enfermeros, periodistas especializados y asociaciones de pacientes. Por eso, según el director técnico del estudio, José María San Segundo, los hospitales que ocupan las primeras posiciones no solo están ahí porque han logrado «excelentes resultados», sino también por «el prestigio» que han conseguido en el sector.
LA BUENA SALUD DE LA PÚBLICA
Al presidente de la Organización Médica Colegial, Juan José Rodríguez Sendín, no le ha sorprendido pero le ha parecido «una buena noticia» la preminencia de una sanidad pública «cuestionada en los últimos tiempos». «Se demuestra que los grandes hospitales históricos han sabido adaptarse a los cambios y mantener la calidad en momentos difíciles», por la crisis y los recortes. «La sanidad pública goza de buena salud», resumió San Segundo.