En la misma semana se han producido dos inundaciones, el cierre del quirófano de oftalmología por goteras y la caída del falso techo en la sala donde se realizan las pruebas de esfuerzo
Lo denuncia el sindicato MATS, “Con la disminución de la plantilla de mantenimiento y la llegada de empresas que vienen a hacer obras y que no conocen el centro, “el hospital se ha convertido una ruina”.
Cada día pasa algo, aseguran, “porque estas empresas solo se dedican a aspectos de embellecimiento, algo visual, o a parchear las averías pero no se encargan realmente del mantenimiento diario que es lo que necesita un centro con tantos años”.
En septiembre, dicen los trabajadores, hubo dos desprendimientos de techo con caída de agua y la semana pasada, antes de que llegara la lluvia, se produjeron dos inundaciones: “el martes, en la planta 11 derecha, en el pasillo donde está situada la UVI pedriática fue como si empezara a llover dentro”. Según el hospital la inundación se produjo por una filtración causada por labores de mantenimiento que deterioraron las placas del techo. Ese mismo día se produjo una rotura de techo con caída de agua en la planta quinta izquierda. En ninguno de los dos casos se produjeron daños personales o materiales y tampoco afectó a la asistencia.
El miércoles 17, siguen relatando, “en el despacho de un médico en la planta tercera izquierda, se cayó parte del falso techo. En ese momento un paciente estaba realizando una prueba de esfuerzo y aseguró, según los trabajadores, que caían fragmentos de pintura del techo y que se puso bastante nervioso. Ese mismo día se tuvo que cerrar uno de los quirófanos de oftalmología porque tenía goteras y se inundó el archivo donde están las historias clínicas.
La versión del hospital es que “se produjo una filtración de agua al salir repentinamente por un pequeño “poro” de una tubería de agua sanitaria. No hubo daños materiales ni personales, tampoco afectó a la asistencia y se subsanó rápidamente quedando la zona afectada en pleno funcionamiento de forma casi inmediata”.