En febrero de 2022, y según los datos de la Comunidad de Madrid, 369 personas esperan para una cirugía en el área de angiología y cirugía vascular del Hospital Clínico San Carlos, 103 más que en junio de 2021. Al mismo tiempo, y según denuncia el sindicato MATS, el centro mantendría cerradas 30 camas en la planta 7 norte, dispuestas para este tipo de intervenciones, desde hace mínimo tres semanas.
“Han cerrado el área de vascular, donde se hayan pacientes tras cirugías de bypass, varices… operaciones que tienen que ver con el sistema circulatorio. Viene siendo habitual, después del verano, que cierren estas camas y cuando se saturan las urgencias las utilizan de comodín”, explica Santiago Zarapuz, delegado sindical del MATS en este hospital.
Desde el Hospital Clínico niegan el cierre de camas y hablan de una “reorganización de camas puntual”. “Debido a la sexta ola de la pandemia, en aplicación del plan de elasticidad del hospital las camas de la planta de hospitalización de cirugía vascular se destinaron a pacientes de Medicina Interna, en cuya área ingresaron los pacientes con covid, pasando los pacientes de cirugía vascular a otra área del hospital. Una vez que la pandemia ha remitido, se ha procedido a la limpieza de la unidad de hospitalización para acoger, nuevamente, a los pacientes de cirugía vascular”, apuntan desde el hospital.
Versión que contradice Zarapuz, quien indica que el MATS ha realizado seguimiento durante todo el mes de enero y febrero de las camas destinadas a enfermos covid “y en ningún momento la planta 7 estuvo ocupada con pacientes covid”.
Listas de espera en aumento
Para Zarapuz, esta situación puede responder a dos causas: un traspaso de actividad asistencial a centros de gestión externalizada, gestionados por grupos como Quirón o Ribera Salud, o bien un ahorro en la estancia de estos pacientes, que suelen pasar entre diez y quince días en planta. “A los pacientes operados en cirugía vascular con estancia más corta les están llevando a la planta de cirugía cardiaca. Y las operaciones más largas se recuperan en las UCI, con lo cual la vascular no se utiliza”, explica el representante del MATS.
Si bien es cierto que la lista de espera en las intervenciones quirúrgicas de este área en el Clínico han aumentado, el tiempo de demora de los pacientes desde junio de 2021 ha disminuido drásticamente
Y sugiere prestar atención a un dato: si bien es cierto que la lista de espera de las intervenciones quirúrgicas de este área en el Clínico ha aumentado, el tiempo de demora de los pacientes desde junio de 2021 ha disminuido drásticamente, pasando de 191 días en junio de 2021 a 80 días en febrero de 2022. Mientras los tiempos de demora en los hospitales de gestión externalizada, como la Fundación Jiménez Díaz, el Hospital Rey Juan Carlos, el Hospital Infanta Elena, el Hospital de Villalba (todos gestionados por el grupo Quirón) y el Hospital de Torrejón (gestionado por Rivera Salud) han vivido un fenómeno inverso, aumentando en su mayoría sus tiempos de demora.
“Aunque han aumentado los tiempos de demora en los hospitales privados no están ni mucho menos al nivel de los públicos, por lo que un pequeño aumento en la demora no supone tantos riesgos para la salud del paciente”
Pero “aunque han aumentado los tiempos de demora en los hospitales de gestión privatizada, no están ni mucho menos al nivel de los públicos, por lo que un pequeño aumento en la demora no supone tantos riesgos para la salud del paciente como en los públicos donde las listas de espera en algunos casos superan los 180 días recomendados para este tipo de intervenciones”, matiza Zarapuz.
Para el representante del MATS detrás de todo esto hay un transvase de pacientes. “Alguien está haciendo negocio con todo esto. Todo movimiento que hacen no lo dan en falso. Esto es una vuelta de tuerca más para favorecer a la privada”, sentencia.
FUENTE: El Salto <——-(Enlace)