Los trabajadores del Servicio de Limpieza del Hospital Clínico San Carlos inician este lunes una huelga indefinida con la que pretenden que la empresa adjudicataria del servicio, Garbialdi, cumpla con el convenio firmado en marzo de 2017. Los trabajadores denuncian que no se están cumpliendo las condiciones del contrato y que la plantilla está por debajo de lo necesario. De hecho, aseguran que en algunas áreas del hospital, se han establecido unos servicios mínimos por encima de los que pueden ofrecer a diario.
Los trabajadores del servicio de limpieza del Hospital Clínico San Carlos, que gestiona la empresa Garbialdi, han arrancado este lunes a las 00:00 horas una huelga indefinida para reclamar el mantenimiento de la totalidad de la plantilla y puestos de trabajo ya que, según el comité de empresa, en la actualidad cuentan para todo el centro con un total de unos 220 trabajadores, frente a los 278 que tendría que haber de plantilla fija. Esta reducción de los recursos humanos se debe, según denuncia la presidenta del Comité de Empresa, Ángela Toribio, en conversación con Madridiario, a que desde la empresa no se están cubriendo las bajas y jubilaciones de la plantilla.
“No estamos pidiendo una subida salarial sino nuestra plantilla”
Los trabajadores que se encargan de la limpieza del Hospital Clínico comenzaron las movilizaciones el pasado mes de enero con seis concentraciones para reclamar que la empresa cumpliera con el pliego de condiciones del contrato firmado en marzo de 2017 con la Comunidad de Madrid. Al concurso de adjudicación de contrato la empresa presentó un proyecto que recogía un total de 336 trabajadores, de los cuales 278 iban a componer la plantilla fija y los 58 restantes se corresponderían con los encargados del servicio. “No estamos pidiendo una subida salarial sino que estamos pidiendo nuestra plantilla”, declara Toribio.
Desde el Comité de Empresa subrayan que ni desde la gerencia del hospital ni desde el SERMAS (Servicio Madrileño de Salud) han tenido respuesta a la petición de intervenir y hacer cumplir los pliegos del contrato y las condiciones laborales de los trabajadores. “Ni han respondido ni se han querido reunir con el Comité”, aseguran. Tras no obtener respuesta por parte de la dirección del hospital, los trabajadores de limpieza optaron por enviar un escrito a la Consejería de Sanidad, pero “tampoco han tenido contestación”.
Desde el hospital aseguran que es un conflicto entre los trabajadores y la empresa, y que ni la gerencia ni el SERMAS pueden intervenir a excepción de establecer los servicios mínimos, comunicados a los trabajadores, de forma oficial, el pasado viernes.
“Es un incumplimiento de convenio”
Tras dos meses de movilizaciones por parte de los trabajadores, el Comité de Empresa convocó oficialmente el 15 de marzo la huelga indefinida con el respaldo del 90 por ciento de los empleados de plantilla fija. “Es un incumplimiento de Convenio”, asegura Toribio, quien afirma que no volverán al trabajo hasta que la empresa cumpla con las condiciones del contrato que tiene con la Consejería de Sanidad. “No interrumpiremos la huelga indefinida hasta que la empresa no recupere los puestos de trabajo que ha eliminado”, avisa la presidenta del Comité.
Los trabajadores, que han intentado solucionar este conflicto a través de mesas de negociaciones con la empresa, no se pudieron sentar con Garbialdi hasta el pasado viernes, cuando la gerencia aceptó reunirse y escuchar las reivindicaciones y peticiones de los trabajadores, tan solo tres días antes del comienzo la huelga. La empresa, que convocó a los trabajadores a través de un portavoz y no por convocatoria oficial, les ofreció “dos contratos fijos pero sin fecha de compromiso”. Para la presidenta del Comité de Empresa lo que se les ofrece “no es nada de lo que nosotros tenemos en mente”. Por ello, los trabajadores se levantaron de la mesa de negociación.
“La oferta que le hemos hecho la han visto inviable”, asegura Toribio, quien añade que lo que le pedían era que “antes del 15 de abril cubrieran las once vacantes que ahora mismo están sin cubrir”; además, los trabajadores querían una fecha de compromiso “para sentarnos a hablar con el objetivo de llegar a acuerdos”.
Otra de las reivindicaciones que hacen los empleados es que se les paguen las horas extra de fines de semana y festivos a final de mes y no “cinco meses después”. La empresa, con la que este periódico se ha intentado poner en contacto pero no ha obtenido respuesta, según el Comité de Empresa no paga las horas extra en el mes correspondiente. Esta situación ha llevado a que diversos trabajadores la hayan denunciado como garantía de conseguir el dinero correspondiente a esas horas. “Se lo pagan en los juzgados, después de que el trabajador denuncie”, señala la presidenta del Comité.
“Los servicios mínimos son excesivos”
Por otro lado, los servicios mínimos que ha establecido la Consejería de Sanidad para esta huelga indefinida de limpiadores están fijados dependiendo de las áreas de hospital. Según un comunicado remitido por el Hospital Clínico el área de críticos o alto riesgo, el turno de noche y sábados, domingos y festivos, y la recogida de residuos contarán con unos servicios mínimos del 100% de los efectivos. Además, el área de semicríticos o riesgo medio contará con unos servicios mínimos del 75%, mientras que el área de bajo riesgo contará con el 50% de los efectivos.
Desde el Comité de empresa consdieran que los servicios mínimos establecidos son “excesivos”. Además, denuncian que con el personal que hay en la actualidad no se llega a los servicios mínimos establecidos por la Consejería. “No llegamos a los requerimientos que ofrecen los servicios mínimos porque estamos muy por debajo, de ahí el requerir la plantilla al completo”, añade Toribio.
Desde el Comité de Empresa critican los argumentos de la empresa para justificar esos servicios mínimos. Según Toribio, se han establecido 17 trabajadores para el área de residuos diarios del hospital, ya que son el número de trabajadores que exige “la ley”. Sin embargo, denuncian que en la actualidad hay cinco trabajadores en el turno de mañana, dos para el de la tarde y uno para el de la noche. “Nos están marcando más mínimos de los que hay a diario”, aclara Toribio.