La justicia reconoce como accidente laboral la crisis de ansiedad sufrida por una trabajadora de Osakidetza debido a la cantidad de trabajo.
S.A.M. es responsable de admisión de consultas externas del Hospital de Mondragón (Gipuzkoa). Debido al exceso de trabajo sufrió una crisis de ansiedad en septiembre de 2016. La trabajadora había comunicado varias veces a sus superiores el exceso de carga de trabajo que venía asumiendo. Ahora, el Juzgado de lo Social número 1 de Eibar (Gipuzkoa) ha reconocido esa crisis de ansiedad como un accidente laboral, según Comisiones Obreras, sindicato que ha seguido el caso.
El médico del departamento de salud laboral de la propia Osakidetza le derivó a su médico de atención primaria en vez de a la mutua, lo que a juicio de Comisiones Obreras constituye “un intento de ocultar el origen profesional de la crisis de ansiedad”.
La sentencia no tiene en cuenta las alegaciones formuladas tanto por la mutua Mutualia, que defendía que no se tratara como accidente de trabajo por haber acudido la paciente al médico de atención primaria, y por la propia Osakidetza que argumentaba que la carga de trabajo era «asumible».
El responsable de salud laboral de Comisiones Obreras de Euskadi, Alfonso Ríos, ha censurado la actitud de Osakidetza, puesto que entiende que esta entidad debería centrar sus esfuerzos en realizar la evaluación de riesgos psicosociales que aún no ha realizado y que serviría para que este tipo de contingencias no ocurriesen, “en vez de centrarlos en ocultar estas patologías, tanto desde su departamento de salud laboral como en los propios juzgados”. El Instituto Nacional de la Seguridad Social tampoco ha considerado la patología accidente de trabajo.