Antecedentes
Durante el gobierno del PP, la salud municipal se concentraba en el O. A. Madrid Salud que fue amenazado durante todo el tiempo de gobernanza, manteniéndose con la soga al cuello y en un progresivo abandono. Lejos de tomar una decisión de liquidación que restase votos al Partido popular, optaron dotarse de las herramientas como la Ley 27/2013, de 27 de diciembre, de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local (https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2013-13756) quitando las competencias que, hasta ahora, estaban atribuidas a la administración local en materia de sanidad, y así, dejar que el Servicio muriese de inanición.
Se puede afirmar que el gobierno del PP realizó, sobre la plantilla de Madrid Salud, un “mobbing institucional” que coincide plenamente con síntomas de “mobbing laboral“ en todos sus aspectos y estrategias.
Tras años de soportar estas condiciones, las consecuencias psicológicas de la plantilla, también coinciden con las descritas para los procesos del “mobbing“, destacando un lento deterioro de la confianza en sí misma y en sus capacidades profesionales, la somatización del conflicto: enfermedades físicas, ansiedad, estrés, irritabilidad, fatiga, cambios de personalidad, problemas de relación, depresión, inseguridad, torpeza, indecisión, conflictos entre las personas y bajas laborales.
Así mismo, el desenlace vuelve a ser idéntico al habitual de la situación de acoso laboral y suele significar una recuperación de la víctima que puede durar años y, en casos extremos, no se recupera nunca la capacidad de trabajo.
El cambio
Tras las elecciones de 24 de mayo,. el equipo de Ahora Madrid empieza su andadura. Ya hace un año largo que gobierna Ahora Madrid en la ciudad. Un año da cierto margen de mejora, ¿qué ha pasado?
Antes de nada, recordemos el programa con el que Ahora Madrid se presentó en lo relativo a la salud municipal:
«3.2.3. Mejora de la sanidad y promoción de la salud en el ámbito municipal
a) Incluir la salud como un objetivo principal de la gestión municipal en su conjunto. Incluir esta perspectiva en todas las políticas municipales en sus diferentes fases de formulación, ejecución y evaluación.
b) Impulsar un plan de ciudad saludable que identifique acciones saludables en diferentes áreas de gobierno municipal y entidades ciudadanas.
c) Impulsar un acuerdo con la administración autonómica para coordinar recursos y unificar planes y programas.
d) Complementar la atención individualizada con una perspectiva poblacional, comunitaria y colectiva, que prime los abordajes multidisciplinares y la prevención y promoción de la salud.
e) Impulsar un proceso de diagnóstico comunitario para identificar las desigualdades sociales en salud y definir acciones específicas a nivel de los barrios y de los grupos sociales más vulnerables.
f) Identificar, abordar y vigilar la existencia de barreras socioculturales de acceso a los servicios sociales y de salud, poniendo en marcha acciones para su eliminación.
g) Implementar programas de salud sexual y reproductiva, así como planes de promoción de la salud en la escuela.
h) Promover la salud y el bienestar a través de la práctica deportiva y mejorar las instalaciones y programas deportivos municipales»
Evaluación de lo implementado
Se nombra un nuevo Delegado de Área José Javier Barbero Gutiérrez, que realiza un cambio en la denominación, que pasa a llamarse Área de Salud, Seguridad y Emergencias.
Se anuncia la creación de una oficina «Madrid ciudad de los cuidados” que dependerá directamente de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y pondrá en marcha el plan de acción «Madrid ciudad de los cuidados 2015-2019». Se anuncia también que el Gobierno municipal prevé como parte del Plan la reconversión de los 16 centros de Madrid Salud en Centros de Salud Comunitarios, así como la ampliación de los mismos a 21 (uno por distrito) al final de la legislatura.
Se continúa con la “estrategia gente saludable” de prevención y promoción de la salud, que se llevó a cabo de 2010 a 2015 (https://www.madridsalud.es/prev_prom_saludambiental/introduccion.php) y se ponen en marcha distintos proyectos muy necesarios para la población como son: Madrid sí cuida, Botellón y salud, iniciativa de cuidados y protección del colectivo LGTB… y se comienza a gestionar un nuevo protocolo de Emergencias (Samur/Summa), que está coordinándose con la Comunidad de Madrid.
También se toma la firme y valiente decisión de reestructurar los CMS hacia Salud comunitaria, decisión tomada ya en 2008 (bajo el antiguo mandato del PP, pero sin implementar por ahorro del coste político) suprimiendo el programa de la menopausia en todos los centros de Madrid Salud ya que, según su propia Ley, el seguimiento ginecológico es competencia propia del Servicio Madrileño de Salud y el Ayuntamiento se dedica a tareas de prevención y promoción de la salud.
Realidades
Actualmente, nos encontramos ante el cierre de tres CMS (Fuencarral, Hortaleza y Villa de Vallecas) en el turno de tarde y en el mes de agosto que los responsables explican debido a la escasez de recursos de personal en la que se encuentra la plantilla de Madrid Salud.
La tasa de reposición para 2016 de una plantilla que reconocen muy envejecida (edad media cercana a 60 años), ha sido de 16 personas, sin que aún estén incorporados y que lo harán a lo largo del año. Está aprobada una futura contratación de aproximadamente 34 profesionales para 2017.
No sabemos bien los criterios que se han llevado y se llevarán a cabo para la contratación de personal, haciendo los responsables, muchas veces referencia a que sería imprescindible contratar con “perfil comunitario”, lo que pone en cuestión el principio de igualdad, mérito y capacidad en los procesos de selección de las administraciones públicas.
El 19 de enero, se aprueba una instrucción para la inclusión de las cláusulas sociales en los pliegos de condiciones en la adjudicación de los servicios municipales externalizados, aún cuando la tendencia de Ahora Madrid debería ser la de remunicipalización de los servicios. Estas cláusulas de la nueva contratación son: política social, igualdad, accesibilidad, seguridad y salud laboral, empleo, estabilidad del mismo y formación en el lugar de trabajo.
CONCLUSIONES
Es una nueva meta la de la salud comunitaria que está deficitaria en la ciudad de Madrid y se hace imprescindible para el desarrollo de la ciudad y de sus vecinos la nueva reorientación de los CMS.
Las campañas, como “Madrid sí cuida”, defienden derechos inviolables de las personas que viven en nuestra ciudad, y es imprescindible que se continúe en esta línea.
No se ha producido ningún diagnóstico de una plantilla enferma y abandonada siendo la tendencia de ésta la desidia, fruto y consecuencia del “mobbing“ institucional realizado por el gobierno del PP, no estando resuelta la recuperación y rehabilitación de las y los trabajadores, para la realización de sus tareas.
Se continúa sin contar con la plantilla para la toma de decisiones, entendiendo que, una de las maneras de que se produzca un cambio, sería el hacerles partícipes activos, hablar y debatir las iniciativas.
La RPT de Madrid Salud está obsoleta y debería modificarse acorde con la restructuración del Servicio, en cuanto a colocar a las/os trabajadores en los puestos que realmente ocupan e identificar las vacantes dotándolas y abriéndolas hacia las nuevas categorías que se precisan para afianzar la nueva orientación, lo que evitaría la contratación “por perfil”, que genera desconfianza. Sería interesante también la apertura de concursos de traslados para que esta plantilla tan deteriorada, tuviese oportunidad de introducir un cambio, pues muchas veces renovarse cambia la visión del conjunto.
La contratación de un efectivo en 2016 de 16 personas y un previsto en 2017 de 34 no soluciona una plantilla en las condiciones anteriormente descritas y tampoco mejora la de la media de edad de 60 años.
Se genera una gran expectativa en la plantilla con el anuncio de la creación de nuevos CMS en los distritos que aún no tienen (de 16 a 21), cayendo en una nueva decepción al ver cómo en el verano de 2016, tras un año largo de gobierno, continuamos en una situación cada vez más precaria, e incluso ahora, con traslados de personal en verano hacia otros centros por el cierre de tres de ellos en el turno de tarde. Es de sentido común el dotar y reforzar bien los CMS que existen antes de crear otros que, aunque bienvenidos, no es en los barrios más desfavorecidos precisamente donde no tenemos presencia.
Vemos cómo las carencias se rellenan por otros actores que desempeñan tareas que, si la plantilla estuviese completa, ésta lo podría realizar. Como explicación de los responsables obtenemos la de que “hibridamos” con el tercer sector no lucrativo, queriendo mantener la relación público-social, por el valor añadido que aportan y a los que no les podemos exigir que siempre sea desde el voluntarismo o la militancia. Argumentando que el desempeño de estas tareas por el personal de plantilla supondría un detrimento significativo de las tareas cotidianas.
Se abre un nuevo debate que plantea numerosas preguntas sin respuesta:
¿Cuáles son, pues, nuestras tareas?
¿Quién decide con quien hibridamos?
¿Hibridar es distinto a externalizar?
¿Debemos continuar con la tendencia de no dotar para 100×100 público?
¿No era generar trabajo público motor de desarrollo?
¿Dónde están los sindicatos representativos del Ayuntamiento, qué opinan, qué acciones están tomando con respecto a todo lo expuesto?…
No cabe duda del avance que suponen las cláusulas sociales en los pliegos de condiciones en la adjudicación de los servicios municipales externalizados, aún cuando la tendencia de Ahora Madrid debería ser la de remunicipalización de los servicios. Pero parece que se queda escaso que, en los contratos que se adjudiquen, deberá observarse al menos uno de estos objetivos. Así, hemos encontrado empresas contratadas, que se definen como sin ánimo de lucro, cumpliendo uno de los requisitos, en cambio, mantienen una brecha salarial del 13 % entre las mujeres y hombres que trabajan en su entidad.
Quedan a merced de los gestores “responsables del programa” los contratos menores adjudicados por el Ayuntamiento de Madrid que se refieren a servicios y suministros de pequeña cuantía, delimitados en el tiempo, que solo obligan a la aprobación del gasto y la incorporación al mismo de una factura menos de 18.000 euros, IVA excluido. Las empresas contratadas mediante esta modalidad ni tan siquiera pasan por el control de “cláusulas sociales” , no teniendo que cumplir, en este caso, ni tan siquiera una de ellas. En el año 2015 se hicieron 5.409 contratos menores en el Ayuntamiento de Madrid, por un importe de 25.460.447,07 euros, cifra nada desdeñable.
El personal de los CMS se encuentra carente de medios que faciliten su trabajo, teniendo que recurrir a la creatividad, generosidad y buena voluntad de las y los trabajadores para resolver y priorizar la atención al ciudadano.
La valiente decisión de la suspensión de las consultas de ginecología para mujeres del programa de menopausia, deja un servicio de radiodiagnóstico excelente con sus medios materiales y humanos, a medio gas, pues ya sólo dará servicio a las mujeres en edad de planificación y a salud laboral. Sería una buena gestión del dinero público que se pusiera en marcha un plan de coordinación con el SERMAS, al igual que ha ocurrido con Samur/Summa, que evitaría derivaciones a la sanidad privada y que carecemos de información de que se haya iniciado o intentado. Es de remarcar que es punto 3 del programa de Ahora Madrid.
Confío que la orientación tomada por el Gobierno de Ahora Madrid es la adecuada, confío en se acepte la crítica constructiva y confío en que se resolverá favorablemente para lograr que Madrid sea la “Ciudad de los cuidados” y se cuide a quien va a cuidar.
Carmen Garaizábal Álvarez.