A primera hora de la mañana, la Puerta del Sol está poco concurrida. Apenas unas horas atrás se llenó de gente en la manifestación de conmemoración del quinto aniversario del 15M. Algún noctámbulo camina de regreso a casa tras una larga noche de San Isidro. Alrededor de la estatua del Oso y el Madroño duermen un par de decenas de personas. Son integrantes del SAT que ayer en asamblea decidieron iniciar una huelga de hambre indefinida exigiendo la libertad de su compañero Andrés Bódalo, el sindicalista del SAT que está condenado a tres años y medio de prisión por agredir al teniente alcalde del Ayuntamiento de Jódar en 2012 durante una protesta de jornaleros que reclamaban peonadas para acceder al subsidio agrario, acusación que Bódalo y el SAT niegan rotundamente. Llegaron a Madrid el pasado jueves, después de 12 etapas de marcha caminando desde la localidad jienense de Jódar hasta la capital. Han pasado la noche sin incidentes, únicamente la Policía les impidió que colocasen tiendas de campaña. Han dormido al raso, sobre cartones y con sacos de dormir y mantas, como las primeras noches del movimiento hace cinco años. Las 16 personas que secundan la huelga sólo se alimentan de agua, azúcar y limón.
El portavoz nacional del SAT, Óscar Reina, atiende a cuartopoder.es. Se muestra encantado con el trato recibido por el 15M y los movimientos sociales de los barrios de Madrid desde que llegaron a la capital. “Ha sido una ola de solidaridad en todo momento. Ayer en la Puerta del Sol confluimos con los indignados y nos dieron la palabra y nos mostraron su apoyo… Eso nos llena de rebeldía para seguir”, asegura el dirigente sindical, quien hace un llamamiento al pueblo de Madrid: “Hacemos un llamamiento al cinturón rojo de Madrid, al Madrid revolucionario, a que se una a nuestra lucha, una lucha por los derechos humanos. Estamos seguros de que el pueblo unido jamás será vencido”. Reina recuerda que la causa de Bódalo “es la lucha por la libertad de conciencia, contra la represión de las personas que luchan por los sin voz, por los oprimidos por el sistema capitalista”. “Nosotros representamos a la Andalucía profunda, no a la del Rocío, sino a la de García Lorca, Blas Infante y Mariana Pineda. Si Andrés está en prisión, somos menos libres, somos más esclavos del sistema capitalista”, añade.
El anterior portavoz nacional del SAT y actual responsable de Relaciones Institucionales del sindicato andaluz, Diego Cañamero, también secunda la huelga de hambre en la céntrica plaza madrileña. “No nos vamos de Madrid hasta que consigamos la libertad de Andrés Bódalo. No pararemos la huelga hasta que esté en libertad”, declara Cañamero. Los sindicalistas quieren reunirse con Soledad Becerril, Defensora del Pueblo, y con Rafael Catalá, ministro de Justicia en funciones. “Hasta que no tengamos un documento firmado por una institución competente asegurando que liberan a nuestro compañero, no nos vamos. Eso seguro”, reitera Reina, quien agradece las muestras de solidaridad de grupos políticos como Podemos e IU. Ayer pasaron por el campamento el número dos de Podemos, Íñigo Errejón, y el que era portavoz de esta formación en el Senado, Ramón Espinar.
Reina detalla que su lucha no es solamente por Andrés. “Estamos aquí por todos los presos políticos, de conciencia y sindicales que hay en este país, como es el caso de Alfon, para quien también pedimos libertad, y queremos impulsar la campaña que llevamos junto a otras organizaciones por una amnistía social“, asegura Reina. “La huelga de hambre se está extendiendo, nos han dicho compañeros de movimientos sociales de Madrid que se sumarán a nosotros próximamente, algunos compañeros del SAT que están en Andalucía ya están anunciando ayunos, y también nos apoyarán desde Cataluña gente próxima a las CUP”, cuenta el portavoz nacional del SAT.
Otro grupo ha acampado esta noche tras las movilizaciones del 15M de ayer en Madrid. Unas 10 personas han dormido frente al Ministerio de Asuntos Exteriores, en la Plaza de la Provincia, muy cerca de la Puerta del Sol, pidiendo derechos para las personas migrantes y refugiadas. A primera hora de la mañana la Policía les ha identificado y les ha hecho retirar las tiendas de campaña. Los activistas continúan frente al Ministerio y aseguran que se quedarán hasta mañana. “Hacemos un llamamiento a los movimientos sociales a que nos apoyen. Tenemos que denunciar las políticas de refugio de la Unión Europea”, dice una de las activistas.
Estoy con las libertades, mucho ánimo