Según los últimos datos publicados por Sanidad, el sistema pierde más del 5% de sus camas operativas y el 4% de la plantilla solo desde 2010.
El informe de Indicadores Sanitarios 2002-2013, publicado el pasado viernes por el Ministerio de Sanidad, evidencia algunas de las graves consecuencias de la crisis económica para el Sistema Nacional de Salud. La más evidente es la caída del número de camas operativas en centros hospitalarios públicos: sólo desde 2010, cuando la estadística establece una ruptura de serie con el periodo anterior, y hasta 2013, últimos datos disponibles, el sistema público de salud pierde 5.942 camas funcionantes. Supone una caída de más del 5% del total de camas activas en los hospitales de todo el país.
La eliminación de plazas en los centros privados es más suave: en 2010 había 29.781 camas en hospitales privados, que al cierre de 2013 se quedan en 28.669. Se traduce en una caída del 3,5% de plazas en el ámbito hospitalario privado, según los últimos datos aportados por Sanidad.
Con la perspectiva de los doce años analizados en el informe, el Ministerio admite que “el número total de camas hospitalarias instaladas en España ha ido descendiendo de manera que, aun habiéndose producido algún incremento puntual derivado de la puesta en funcionamiento de nuevos hospitales, el número total de camas ha disminuido en 4.255 desde 2002 hasta 2013”. Pero esa cifra se refiere a las camas instaladas: “Dicha disminución es aún mayor en el número de camas que finalmente son puestas en funcionamiento para la atención en hospitalización, ya que dicho número ha sufrido una disminución de un 5% en ese período”, expone el Ministerio.
En 2013 había 4.500 camas operativas más que en 2002, para un incremento poblacional de 5,2 millones de personas (la población ha experimentado una tasa de crecimiento del 12, 7% en los doce años). No obstante, no es posible analizar de forma lineal los datos de toda la década por el cambio en la medición: a partir de 2010, la estadística incluye a los hospitales de las Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales de la Seguridad Social (MATEPSS) como pertenecientes al SNS, “dada su financiación con cargo a la Seguridad Social”, explica Sanidad.
También han pasado al cómputo público algunos centros que con anterioridad a 2009 se consideraban como privados y que tienen financiación mayoritariamente pública (en más del 80% de su actividad).
La única explicación que aporta el Ministerio es que la cantidad de camas en funcionamiento en las áreas quirúrgicas “va asociada a un aumento en el número de procesos quirúrgicos que no requieren hospitalización”. Explica que en 2002, de cada 100 intervenciones, el 28% se realizaban sin ingreso del paciente; en el año 2013 esta proporción ha aumentado al 44%. No obstante, el crecimiento demográfico dejaría sin explicación una caída tan significativa, cuando el país tiene cinco millones de habitantes más.
La estadística desagrega sistemáticamente los datos en dos grandes categorías de agrupación de hospitales, en función de para quién prestan servicios: por una parte, el Sistema Nacional de Salud (SNS) que engloba los hospitales de dependencia pública, la red de hospitales de utilización pública en Cataluña y los hospitales con concierto sustitutorio y, por otra, los hospitales del sector privado.
Los hospitales públicos generalistas han pasado de 299 en el año 2002 a 315 en el año 2013. Para esta misma finalidad, en el sector privado el número de hospitales ha pasado de 260 para el año 2002 a 241 en 2013. Los hospitales con concierto sustitutorio, que son de dependencia privada pero encuadrados dentro de la red del SNS por criterios de financiación, han pasado de 2 hospitales en 2002 a 14 en 2013.
Recortes en personal
Los medios no son el único foto de la disminución de partidas sanitarias como consecuencia de las políticas de austeridad de los últimos años. Como vienen reclamando los colectivos de trabajadores sanitarios, la caída del personal es la otra gran cara del recorte: en 2010 había 471.661 trabajadores entre personal vinculado y colaboradores en centros y hospitales públicos. Al cierre de 2013 el global de trabajadores sanitarios cae a 452.275, dejando por el camino la eliminación de 19.386 puestos de trabajo en el ámbito sanitario a nivel nacional. Se trata de una pérdida de alrededor del 4% de la plantilla pública para Sanidad.
Por el contrario, el personal sanitario en centros privados ha obtenido un significativo repunte en los años más duros de la crisis económica: en 2010 había 81.107 profesionales en el ámbito privado, y al cierre de 2013 el colectivo ascendía a 85.392 personas. Se trata de un aumento del 5% de la plantilla de los centros privados.
Fuente: El Boletín