Desde el MATS, apoyamos la campaña de concienciación convocada por AME para el próximo 4 de noviembre con el lema #StopEstatutosMordaza. Se trata de un atentado a la libertad de expresión y a la dignidad de la profesión.
Así consta en el borrador de los nuevos estatutos del Consejo General de Enfermería. Varias organizaciones de enfermeras lo han definido como unos «estatutos mordaza» porque buscan «silenciar a los profesionales críticos»
Cualquier enfermera que “vulnere el honor, la reputación, el buen nombre, la dignidad, intimidad y/o la propia imagen de cualquiera de los órganos unipersonales o colegiados de la Organización Colegial, a través de cualquier medio, verbal o escrito; incluido las cometidas a través de Internet y redes sociales” será sancionada con una falta muy grave.
Pero no solo se perseguirá las ofensas, también “la promoción y/o realización de campañas de descrédito hacia los cargos corporativos o colegiados de la Organización Colegial”.
En estos dos escenarios, a estos profesionales se les sancionaría con una falta muy grave, es decir, se enfrentarían a una inhabilitación del ejercicio profesional entre tres meses y un año y la suspensión también de su condición de colegiado.
Este es el nuevo artículo 54 del Proyecto de Estatutos de Enfermería al que ha tenido acceso la Cadena SER, y que el pasado 16 de octubre se envió a todos los colegios de enfermería de España.
El Presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, que lleva al frente de este órganos desde hace más de 20 años, quiere protegerse de las ofensas que recibe en las redes sociales «a míme llaman hijo de puta, o que me van a romper las piernas porque es muy barato, eso en qué cabeza cabe. Si eso es lo que defienden estos señores, entonces hay que echarles de la profesión, eso no se puede permitir, faltaría más«.
No hay duda de que la actual junta directiva ha decidido endurecer las sanciones. En el anterior Estatuto del Consejo de Enfermería se recogían ocho situaciones en las que un enfermero se podía enfrentar a una falta grave, ahora, en el actual borrador se han triplicado, recogen hasta 24 tipos de faltas sancionables.
Máximo González Jurado defiende que será la Comisión Deontológica del Consejo General de Enfermería quien decida en qué casos se sanciona, de forma “completamente independiente”.
Denuncian una caza de brujas
Sin embargo, varias organizaciones de enfermería de toda España, entre ellas AME, la Asociación Madrileña de Enfermería denuncia que «estamos ante unos estatutos mordaza«, según explica la portavoz de AME, Alda Recas, «porque no quieren una enfermería democrática, no quieren que seamos críticos”, y por eso creen que solo buscan silenciarles, “este artículo atenta contra los derechos fundamentalescontra la libertad ideológica y de expresión”.
Por eso han pedido amparo al Consejo Internacional de Enfermería al que han remitido una carta para alertar de esta situación. Un paso que cuestiona el presidente del Consejo de Enfermería de España porque “aquí en Consejo Internacional de Enfermera no tiene nada que decir, es una federación internacional que no tiene nada que decir”, sentencia Máximo González Jurado.
El Colegio de Enfermería de Navarra también se opone a estos nuevos estatutos. “Es un régimen sancionador demasiado intenso que está fuera de lugar”, y no tiene duda que busca acallar a los críticos “es un traje a medida para conseguirlo”, según ha explicado a la SER su presidente, Carlos Sesma. Por eso, el Colegio de Enfermería de Navarra va a presentar alegaciones contra este Proyecto de Estatutos, según han confirmado a la SER (los 54 colegios tienen 20 días hábiles para presentar alegaciones al proyecto).
Otros órganos colegiados de enfermería, como el de Baleares ha encargado un estudio jurídico para analizar la legalidad de estas modificaciones.