Dicho estudio, titulado ‘Informe 2015 sobre la Situación Sanitaria en las Comunidades Autónomas’, tiene en cuenta distintos parámetros relativos a la financiación y el funcionamiento, la política farmacéutica, la valoración de los ciudadanos, las listas de espera y la privatización sanitaria.
Así, en el estudio se observa que Madrid tiene 3,45 camas por cada 1.000 habitantes y 10,08 quirófanos por cada 1.000 habitantes. En este sentido, la comunidad que menos quirófanos tiene es Castilla La Mancha, con 6,61, y la región con mayor número es Navarra, con 11,07.
Respecto a los médicos de Atención Primaria, Madrid cuenta con 0,69 por cada 1.000 habitantes, y con 0,51 enfermeros de Atención Primaria por cada 1.000 habitantes. Respecto a los médicos de Atención Especial, la Comunidad cuenta con 1,94 por cada 1.000 habitantes y con 3,24 enfermeros de Atención Especial para el mismo ratio de población.
En cuanto a la opinión ciudadana, un 82,70 por ciento de los encuestados consideran que la atención recibida en Atención Primaria, especialista, urgencias y hospitalización fue «muy buena o buena». Para un 15,87 por ciento, la Atención primaria, especializada y hospitalización ha mejorado respecto a 2014 y para el 69,6 por ciento de los encuestados la Sanidad funciona «bien o bastante bien».
Si se atiende a las cuestiones sobre las listas de espera, un 9,3 por ciento de los encuestados señalan que estas mejoraron respecto a 2014.
El objetivo de estos informes es el de evaluar «las diferencias en los sistemas sanitarios autonómicos». Todo ello partiendo de la base de que una gran diferencia en los recursos y funcionamiento de los servicios sanitarios conllevaría de manera inevitable una desigualdad en el acceso a la protección de la salud lo que vulneraría un derecho constitucional.